Secuestro en el Capitolio

De cómo  en Estados Unidos la legislatura  es paralizada desde dentro.

 Veamos como se ha acentuado la agresividad de la mayoría republicana en la Cámara de Representantes durante toda la legislatura del segundo período de la presidencia de Obama y especialmente en las últimas semanas. 

1. Los halcones del partido del té se rasgaron las vestiduras por los mil y pico de víctimas del ataque con armas químicas en Siria y el arreglo de Obama  con la mediación de Putin, pero obstruyen sistemáticamente cualquier medida de mayor regulación a la posesión de armas de fuego por civiles, siendo que las muertes por armas de fuego en este país  fueron 31672 en el 2010 y 32163 en el 2011.

2. El ordenamiento social en Estados Unidos requiere con urgencia una reforma migratoria que incorpore a los 12 millones de trabajadores legalmente marginados. Lo necesita además la economía, que recibiría una buena inyección de efectivo en pagos administrativos por parte de esa masa humana,  mayor que toda la población de Cuba. No hay proyecto sobre el tema que convenga a la pandilla de republicanos extremistas  que tiene cogido por el cuello al timorato y falto de liderazgo de Boehner, quién los preside.

3. La última hazaña de la tropa que maneja al "Hablantín de la Cámara" ha sido convoyar a la aprobación de la ley de financiamiento provisional del gobierno para el inminente nuevo año fiscal la supresión de fondos para la Ley de Cuidado de Salud Asequible. Esta ley fue aprobada por todo el Congreso en el primer período  de Obama y aunque se ha convertido en el blanco favorito de las andanadas del partido de los elefantes, lo cierto es que la mayoría de los estadounidenses la ratificaron, de cierta manera, cuando eligieron a Obama por segunda vez. Aunque el Senado le cortará las alas a este despropósito, lo que en verdad persigue la maniobra es provocar una crisis mayúscula al negar fondos a la administración para sostener la vida ordinaria del país.

Hablando claro, se trata de hecho -no de opinión- de un secuestro del presupuesto y la exigencia, como pago por el rehén, de la entrega de la Ley de Cuidado de Salud  Asequible. Una trampa sin precedentes fraguada por los apandillados del sabotaje al gobierno, usando las reglas del juego democrático.