lunes, 16 de agosto de 2010

As Time Goes By (Al Pasar el Tiempo)

"Porque el tiempo es una invención del hombre, es el espacio que media entre sucesos diferentes, así se inventó el tiempo; pero ¿cuando empezó el tiempo? Habría que explicarse eso. Es todo muy complicado" Fidel Castro 84

Craig Callender, profesor de Filosofía en la Universidad de California, publica un artículo en La revista Scientific American de junio de este año titulado “¿Es el tiempo una ilusión?”. No es la primera vez que las posiciones filosóficas idealistas pretenden valerse de ciertas contradicciones de teorías de la Física para escamotear la existencia objetiva de aspectos de la realidad. Desde los tiempos de Sócrates (siglo IV AC) se intentaba desmenuzar el concepto de Tiempo. Federico Engels en la sección primera del Anti-Dhüring, dedicada a la filosofía, bate con éxito las concepciones idealistas del mundo que propugnara Eugen Dühring, entre ellas “el contenido del tiempo”. Esto a fines del siglo XIX.
Ahora, casi siglo y medio después, un grupo de físicos y filósofos se afanan en sembrar dudas sobre la existencia real del tiempo. Veamos en forma simple sus principales argumentos:

 La negación del carácter unidireccional del tiempo (pasado-presente-futuro) planteada por el físico Ludwing Boltzman debido a que, en el papel, las leyes de Newton trabajan igualmente bien adelante y hacia atrás en el tiempo. Por cierto, esta propuesta del tiempo bidireccional, meramente teórica, hecha a principios del siglo XX, hasta la fecha no ha sido aceptada por la comunidad de físicos.

 La teoría general de la relatividad exige la admisión de varios tiempos diferentes (coordinado, apropiado, global) lo que inquieta a algunos físicos que consideran que una teoría unificada tendría que eliminar a esa variable como tal.

 El tiempo podría no tener una existencia independiente, sino surgir como una simple manera de describir las relaciones entre objetos.

 La relatividad aparentemente ha asimilado el tiempo al espacio: lo ha convertido en una mera dirección más dentro del espacio-tiempo.

Estas y otras muchas consideraciones, siempre vestidas de un atuendo supuestamente científico, buscan la atención de los neófitos con la pretensión de hacer desvanecer el tiempo ante nuestra asombrada vista, tal y como el ilusionista David Coperfield hizo “desaparecer” la Estatua de la Libertad.
Los físicos nos quieren impresionar con estas especies de aporías modernas, Zenón quiso convencernos de que nunca el veloz Aquiles podría dar alcance a la tortuga.

Una cosa es que desconozcamos la naturaleza esencial del tiempo y otra que podamos desentendernos de él mediante las contradicciones y debilidades de nuestra propia ignorancia. Las relaciones causales sobre las que se asientan la mayoría, si no todas las leyes científicas son inconcebibles sin el tiempo ¿Cómo podría una consecuencia no suceder a su causa? Las predicciones de la teoría probabilística requieren del tiempo para ser válidas ¿Acaso en un dado tirado podría salir el 5 y el 3 a la misma vez? Por otra parte, si bien la teoría de la relatividad general exige la descomposición del tiempo en diversas características, la Mecánica Cuántica tiene en el tiempo su componente esencial: la descripción completa de los objetos viene dada por una función matemática llamada el estado cuántico, la cual evoluciona continuamente en el tiempo. Más elemental aun, y en términos físicos, la velocidad (e/t) y la aceleración (ΔV/t) son magnitudes básicas que dependen enteramente del tiempo. El tiempo es la métrica que separa los eventos, es el medio en el que se produce el cambio y el Cambio es  como dicen que debe ser Dios, eterno y omnipresente pero a diferencia de Aquel, a este podemos verlo.

Conclusión: Si bien la física moderna no ha dado con la naturaleza exacta y completa de esta variable de la duración, de esta cuarta dimensión, de este río eterno que (mientras que no me demuestren lo contario) fluye en una sola dirección, hay una verdad absoluta en relación a él, que todos debiéramos tener presente: Nada resiste el paso del tiempo.

Y no te pierdas a Sinatra:

2 comentarios:

Gloria dijo...

Aunque no creo que "cualquier tiempo pasado fue mejor" (que esperarían entonces mis hijos y nietos si su futuro será peor que mi pasado), me encantaría regresarme en el tiempo, sólo parcialmente, no para corregir lo que haya hecho mal ni recuperar la tersura de la piel,sino para recuperar la salud y sana irresponsabilidad de la juventud, es eso lo mejor de mi "tiempo pasado".
Por supuesto, no me perdí a Sinatra. Casablanca es atemporal, nunca será pasado ni futuro, es un eterno y maravilloso presente.
Saludos

alicia Vazquez dijo...

No reconozco haber tend algun tipo de adiccion en Mi existence terrenal; pero creo Sus blogs me estan haciendo sentir la la necesidad de ir alli; sera acaso la necesidad de encontrar lo que Se desea aprender? Gracias por no permitir que el maestro q lleva dentro muera!!!! Doy gracias por la suerte q tengo y tener un telefono q me facility llegar .