Planteamientos básicos de los dos contendientes en las áreas de cuidado
de salud, seguridad social y educación.
El bienestar social es la parte de la política que más directamente atañe
día tras día a la ciudadanía. Sus tres pilares son la atención médica, la
seguridad en la vejez y circunstancias
especiales, y la perspectiva para las nuevas generaciones, en gran medida
dependiente del acceso y la calidad de la
educación.
ATENCIÓN MÉDICA: El problema mayor es financiero porque el actual programa de MEDICARE se quedaría sin fondos en el año 2023. Veamos la estrategia correctiva general de ambos candidatos. Obama se centra en ahorros mediante: reducir pagos a proveedores (HMOs, etc,) y a los planes de Medicare Aventajado; algo parecido con las compañías farmaceúticas, los fabricantes de implementos médicos y las aseguradoras; ampliar la cobertura en la prevención lo que a la larga recortaría el gasto, al reducir los costosos estadios avanzados de la enfermedad. Romney derogaría la Ley de Salud Accesible (LSA) ipso facto y sustituiría el actual sistema con un vale (especie de sellos de salud) con el que la gente compre cobertura privada. Es justo aclarar que, en medio de plena campaña electoral, Romney ha dicho que esto no afectará a los actuales beneficiarios, solo a quienes entren al plan dentro de una década. Lo que revela con claridad que el cambio es para peor y se posterga todo lo creíblemente posible en el papel. Si los gastos médicos de los beneficiarios excedieran el monto de su vale, los ancianos tendrían que pagar la diferencia. Esto sería la regla en una población de la tercera edad, aquejada de dolencias crónicas de demandas sostenidas de fármacos y procedimientos médicos. Los críticos dicen que las aseguradoras acabaría reclutando a las personas mayores más jóvenes y saludables bajo el nuevo sistema, dejando que el Medicare tradicional se quedara con las personas de más edad y más enfermas, que son las más costosas de atender ¡Vaya ahorro que le esperaría al MEDICARE!. Queda mucho fuera del tintero en este acápite pero no puedo ser exhaustivo si voy a completar la triada.
ATENCIÓN MÉDICA: El problema mayor es financiero porque el actual programa de MEDICARE se quedaría sin fondos en el año 2023. Veamos la estrategia correctiva general de ambos candidatos. Obama se centra en ahorros mediante: reducir pagos a proveedores (HMOs, etc,) y a los planes de Medicare Aventajado; algo parecido con las compañías farmaceúticas, los fabricantes de implementos médicos y las aseguradoras; ampliar la cobertura en la prevención lo que a la larga recortaría el gasto, al reducir los costosos estadios avanzados de la enfermedad. Romney derogaría la Ley de Salud Accesible (LSA) ipso facto y sustituiría el actual sistema con un vale (especie de sellos de salud) con el que la gente compre cobertura privada. Es justo aclarar que, en medio de plena campaña electoral, Romney ha dicho que esto no afectará a los actuales beneficiarios, solo a quienes entren al plan dentro de una década. Lo que revela con claridad que el cambio es para peor y se posterga todo lo creíblemente posible en el papel. Si los gastos médicos de los beneficiarios excedieran el monto de su vale, los ancianos tendrían que pagar la diferencia. Esto sería la regla en una población de la tercera edad, aquejada de dolencias crónicas de demandas sostenidas de fármacos y procedimientos médicos. Los críticos dicen que las aseguradoras acabaría reclutando a las personas mayores más jóvenes y saludables bajo el nuevo sistema, dejando que el Medicare tradicional se quedara con las personas de más edad y más enfermas, que son las más costosas de atender ¡Vaya ahorro que le esperaría al MEDICARE!. Queda mucho fuera del tintero en este acápite pero no puedo ser exhaustivo si voy a completar la triada.
SEGURIDAD SOCIAL: El Seguro Social está en
mejor estado financiero porque sus fondos soportarían 10 años más que el
sistema del MEDICARE tal y como están ahora. Obama aumentaría impuestos por encima del tope en que se detienen
ahora, que es de ingresos de $110 100 anual. Romney aumentaría gradualmente la edad para ser elegible y
reduciría la tasa de crecimiento de beneficios para los retirados de altos
ingresos.
EDUCACIÓN: Obama ha implantado el programa
“En carrera a la cima” diseñado para promover las iniciativas y
procurar incentivos para mejorar los resultados en educación. En consecuencia, más
de una docena de estados han realizado cambios para incrementar los estándares e
implementar reformas. A propósito de esto, ayer se supo que el distrito de
Miami Dade que dirige el superintendente general de escuelas Alberto Carvalho
recibió el premio nacional para
la educación urbana “Broad Prize” por la mejora de sus
tasas de graduación entre estudiantes negros e hispanos, y por aumentar el
porcentaje de las minorías que alcanzan niveles avanzados en los exámenes
estatales. Romney comparte la
creencia en la necesidad de mejorar la calidad y el acceso a la educación pero
contrario a Obama que propugna incentivos e inversiones, el Gobernador
considera que el atraso proviene de los sindicatos de maestros y la aplastante
burocracia. Entre sus medidas concretas él apoya el uso de impuestos para pagar
repasadores o clases particulares en escuela privadas que incluyen las escuelas
parroquiales.
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