La Conferencia

CUBA-CASTROLANDIA

Un vocablo, la RAE y libre asociación de ideas.

Me refiero al término “Conferencia” que ocupó la actualidad oficial de este fin de semana en el caimán de la portada. El largo lagarto verde que decía Guillén. La Conferencia me trae a la memoria la cafetería esquinera en 10 de Octubre y Acosta que aparece en la foto cabecera,  donde degusté algunas veces las exquisitas croquetas Glue-sky.

Pero mejor veamos  las acepciones del diccionario de la que limpia, fija y da esplendor a nuestra lengua para el vocablo en cuestión. Al pie de cada una, dejo el resultado de la anarquía decretada en el territorio autónomo de mi cavidad craneal, para el libre flujo de circuitos eléctricos entre las neuronas todavía indemnes a los ataques del calendario y del desmemoriado alemán.

1.     “Plática entre dos o más personas para tratar de algún punto o negocio.”

      Evoco las pláticas de Cantiflas haciendo de abogado en una de sus películas o las de Tres Patines acusado en la Tremenda Corte.

2.     “Disertación en público sobre algún punto doctrinal.”

       La impronta de estos años viviendo donde manda el billete saltó de mis neuronas, que asociaron estas “conferencias” con modus vivendi de “exes”. Pensé en Gorbachov y en Clinton que hicieron y de vez en cuando todavía hacen buen billete disertando de lo que fue, y de lo que pudo ser y no fue, a decir de Cheo Malanga que es como si nunca hubiese fuese sido

3.     “Comunicación telefónica interurbana o internacional.”

       Aquí chisporrotearon neuronas del hipocampo evocando películas españolas y argentinas donde me sonaba raro que pidieran a las telefonistas una conferencia, para lo que nosotros todavía conocemos simplemente por llamadas de “larga distancia”. 

4.     “En algunas universidades o estudios, lección que llevaban los estudiantes cada día.”

       Alguna ambigüedad encuentro en esta definición de los académicos con eso de “llevaban los estudiantes”. Recuerdo por mis hermanos y primos mayores que en un tiempo así le llamaban a los folletos mimeografiados que contenían resúmenes de los contenidos de  las materias de estudio. Ya en mi época la conferencia era una de las “formas de enseñanza” junto con las clases prácticas, seminarios, talleres, etc.

...y por fin...

5.     Reunión de representantes de Gobiernos o Estados, de comunidades eclesiásticas y de agrupaciones de otra índole, para tratar asuntos de su competencia.

     "El verdadero arte de la política consiste en no perder el poder". Es lo único que se me ocurre. Es el circuito reverberante entre neuronas lúcidas, a partir de lo que pasó en Cuba este domingo y los 53 años y 28 días que le han precedido. Ah, y que en Cuba siempre han habido y siguen habiendo excelentes artistas.