Glorias Eternas del Arte (III)

Una opera comienza mucho antes de que se alcen las cortinas y termina largo tiempo después de haber caído el telón. Empieza en mi imaginación, se convierte en mi vida y permanece como parte de ella mucho después de abandonar el teatro...   Maria Callas

Tercera oportunidad de evocar una figura legendaria en las artes. Si en la primera fue una gloria del  ballet y en la segunda un clásico de la comedia, hoy traigo una de las cumbres en la manifestación artística de mi preferencia: el teatro lírico.

La brevedad necesaria de estas entradas me inhibe de escribir de la Callas, la mujer y la ARTISTA. Más de 30 libros se han dedicado a contar sobre ella, lo que es reflejo de su extraordinaria trascendencia.  Una breve biografía en español, de las muchas que hay, se las pongo a la mano en  este enlace .

Un botón de muestra de su arte en el siguiente vídeo.

A los que disfrutan de esta manifestación artística, les recomiendo los videos de la biografía (Mundo E&A) que youtube presenta en doce partes. En mi opinión personal, para los que nos tocó estar vivos en esta época asomarse a las vivencias de esta mujer excepcional y apreciar instantes culminantes de su arte, es uno de los privilegios de nuestra existencia que no debiéramos perdernos. Aunque comprendo que el canto operático es un arte que requiere cierto acostumbramiento y educación del oído, creo que lo bien logrado de esa biografía consigue transmitir la grandeza, la pasión y el virtuosismo de ls inmensa diva a cualquier ser humano. Por eso les pongo los doce enlaces, para el que quiera: (1) (2) (3) (4) (5) (6) (7) (8) (9) (10) (11) y (12).

Cuba no ha carecido de voces femeninas destacadas. Decenas de ellas han desfilado dignamente en escenarios nacionales y del mundo. Dos de las mejores fueron Martha Pérez, quién llegó a actuar en la Scala de Milán,  y Alba Marina con un registro amplio y una técnica depurada. 

En la actualidad la soprano cubana Eglise Gutierrez se pasea por los escenarios operáticos de Europa, América y Asia al más alto nivel contemporáneo.

Eglise Gutiérrez

 en fragmento de LUCÍA DI LAMMERMOOR escena de la locura